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Ocho tipos de errores de traducción que pueden arruinar el contenido (y cómo evitarlos)

Verity Hartley

Back of woman sitting at a computer with two screens that have information up on both screens

En un mundo globalizado como el nuestro, las empresas dependen de la traducción para comunicarse de un modo efectivo entre idiomas y culturas. Sin embargo, los errores de traducción pueden ser costosos, dañar la reputación de la marca, retrasar la entrada en un mercado e incluso conllevar riesgos jurídicos o de seguridad. Aunque los errores son inevitables, comprender los más comunes e implementar medidas de control de calidad pueden reducir drásticamente su aparición. 

En este artículo se analizan los errores de traducción más comunes, las diferencias entre errores objetivos y subjetivos, y las mejores prácticas para una calidad lingüística elevada. 

Errores de traducción objetivos y subjetivos 

Al revisar contenido traducido, los errores suelen clasificarse en dos categorías: 

  • Errores objetivos: errores claros e indiscutibles, como errores de ortografía, gramática o formato. 

  • Errores subjetivos: con más matices y abiertos a la interpretación, como las incoherencias de estilo o las traducciones erróneas basadas en preferencias personales. 

Ambos afectan a la precisión lingüística, legibilidad y eficacia de comunicación. 

Errores comunes de traducción y su impacto 

  1. Traducciones erróneas 

    Interpretar erróneamente palabras y frases puede alterar el significado del contenido, lo que daría lugar a confusiones e interpretaciones erróneas. Algo especialmente crítico en sectores como el sanitario, jurídico y técnico, donde las imprecisiones pueden tener consecuencias graves. 

  2. Omisiones 

    Omitir palabras, frases o apartados completos puede cambiar significativamente el significado de un documento. Pueden perderse detalles importantes que hagan que la información quede incompleta. 

  3. Interpretaciones culturales erróneas 

    Los matices culturales, las frases hechas y las expresiones coloquiales no siempre tienen una traducción directa. Sin la localización por parte de expertos, las traducciones pueden sonar raras o no transmitir el mensaje. 

  4. Ausencia de materiales de referencia 

    El no poder acceder a glosarios, bases de datos terminológicas y guías de estilo puede hacer que los traductores tengan problemas a la hora de mantener la coherencia en cuanto a la terminología y la marca, especialmente en sectores especializados. Más información sobre la importancia de las bases de datos terminológicas en la coherencia de las traducciones. 

  5. Errores tipográficos y gramaticales 

    Los errores básicos de ortografía, puntuación o gramática socavan la credibilidad y generan una experiencia de usuario deficiente, especialmente en materiales destinados a los consumidores. 

  6. Errores de formateo y espaciado 

    Cada idioma tiene una longitud propia: algunos se expanden considerablemente cuando se traducen mientras que otros se reducen. Si no se ajusta el espaciado y el diseño, el texto podría volverse ininteligible, lo que afecta a la experiencia de usuario en software, sitios web y manuales de productos. 

  7. Utilización incorrecta de las mayúsculas 

    Las reglas de uso de las mayúsculas son diferentes en cada idioma. Un uso inadecuado de las mismas puede cambiar el significado o incluso infringir las normas del sector, lo que afectaría a la integridad de la marca. 

  8. Posedición insuficiente 

    La traducción automática puede acelerar los flujos de trabajo, pero sin la intervención humana, puede dejar pasar errores de fluidez, tono y precisión. 

  9. Omisión de la validación final 

    Una revisión final realizada por expertos nativos garantiza la precisión cultural, la conformidad y la legibilidad. Sin ella, incluso pequeños errores pueden debilitar la credibilidad y precisar costosas revisiones. 

Cómo minimizar los errores de traducción 

  1. Ofrecer un material original claro 

    La calidad del texto original afecta directamente a la calidad de la traducción. Escribe de una manera clara y sin ambigüedades para que el proceso sea más fluido y preciso. 

  2. Establecer pautas de estilo y terminología 

    Garantiza que los traductores puedan acceder a guías de estilo, bases de datos terminológicas y memorias de traducción para mantener la coherencia del contenido. Descubre las integraciones API de LanguageWire para automatizar y estandarizar las traducciones. 

  3. Implementar revisiones y validaciones 

    Un segundo par de ojos (de revisores y validadores nativos) puede detectar incoherencias y perfeccionar traducciones antes de la aprobación final. 

  4. Colaborar con servicios de traducción profesionales 

    Asociarse con lingüistas experimentados, expertos en localización y plataformas de gestión segura de traducciones garantiza resultados de la máxima calidad con unos errores mínimos. Descubre cómo nuestra plataforma segura protege tus datos a lo largo del proceso de traducción. 

Traducciones de alta calidad con LanguageWire 

Los errores de traducción no se pueden eliminar por completo, pero unos procesos de control de calidad sólidos pueden reducir considerablemente los riesgos. Al priorizar la precisión, la coherencia y la validación, las empresas pueden mantener su credibilidad, mejorar la experiencia de los usuarios y entrar en mercados globales con confianza. 

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